Cuando mis padres me dieron un Oric-1 en lugar del ansiado ZX-Spectrum, me enojé pero esto me impulsó a aprender programación en Basic y ensamblador del 6502 a los trece años. Más tarde, con un Amstrad CPC-6128, me adentré en el cracking y las cracktros.

Pero donde la gocé de verdad fue con el Atari ST, que me permitió descubrir a los grandes programadores europeos que poblaban la demoscene. Y yo desde mi ingenuidad adolescente los traté de imitar bajo el nombre de guerra de Canal23.

Luego vino la universidad, y el mundo de la informática "seria"... hasta que durante la pandemia decidí desempolvar mis habilidades de "demoscener" después de 30 años.